Capítulo 1

Bueno demomento he hecho historietas y ahora me gustaría centrarme en un a particular^^.
Espero que os guste :P Besos
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Como todos los días, Diana se había vuelto a levantar tarde. Todas las noches en su subconsciente le repetía que como una niña normal de 17 años tenía que llegar puntual a sus clases, sin embargo…esta no tenía remedio.

Menos mal que por las noches no tenía que estar cuidando de ella porque sino…, como ángel tengo unas horas libres y esas me ayudan a descansar mucho, ya que no puedo descansar como una persona normal. El motivo es…que los ángeles no duermen.

Bueno, lo mejor será que me presente. Soy Jazmín, el ángel guardián de Diana. Todos los ángeles tienen algo de belleza, sin embargo yo he sido la excepción de todos, nadie cuando me mira se queda deslumbrado por mi belleza, ni por mi resplandor…Simplemente me parezco a una humana normal y corriente(es lo único que me gusta de esto), mi cabello es rubio y largo, tengo unos ojos verdes penetrantes y mi piel es blanca como la nieve(odiaba ser tan blanca..)

Tampoco me quejo, nadie excepto yo tiene una apariencia humana. Bueno, quitando el detalle que yo tengo unos doscientos años…. (con apariencia de diecisiete)

-¿ya se ha despertado?-dijo Jaled. El es el demonio de Diana, todo el mundo tiene un ángel y un demonio que les observa y nosotros dos somos los de esta niñita de 17 años.

-sí, tarde como siempre…-dije sebera y fulminándole porque había vuelto a ganar “la batalla”

-jajaja, ya te dije que no iba a permitir que esta niña llegara puntual.-se revolvió su pelo cobrizo.

-¿porque siempre tienes que hablar así de ella?-pregunté ironizando mientras me miraba con sus ojos gatunos.

-¿y porque me tienes que dar órdenes cuando te saco unos trescientos años?-decía agudamente como siempre.

-déjalo ya, sabes perfectamente que por ser un estúpido angel no puedo pelearme.- me tranquilice mientras seguíamos a Diana

-¿quién es estúpido?, ¿has dicho que los ángeles son estúpidos?..., a Miguel no le va a gustar eso….-se reía malicioso enseñando sus pequeños colmillos.

-Miguel sabe perfectamente que odio ser un ángel, que odio tener estas estúpidas alas, ¡que odio todo esto!...-grité mientras me malhumoraba

-Jazz…digo Jazmín-se corrigió rápidamente- ¿Por qué odias tanto esto?, bueno es verdad que el odio es espectacular y que nada te sube tanto la adrenalina como el odio pero…

-Jaled así no ayudas…-le dije sonriente por verle de esa forma, en el fondo este demonio era muy majo….

-bueno ya sabes a lo que me refiero, yo tengo que servir a Phenex que sigue siendo tan iluso que cree que volverá a los cielos pero… yo no odio esta vida, bueno si la odio pero no como la odias tu.-me encantaba verle hecho un lio, así si valía la pena estar a su lado…No pude evitar reírme…- ¿te parezco gracioso?-en su rostro apareció una sonrisa

-no…jajaja…lo siento…-decía mientras me tapaba la boca para disimular un poco la risa…

-al menos te he hecho reír…-pareció alegrado de haber conseguido su objetivo

-sí, gracias…-le sonreí de oreja a oreja.-Hay una cosa que no entiendo….¿cómo puedes hablar así de tu amo?

-a los demonios nos da igual la manera en cómo nos juzgan…., simplemente sigue nuestras normas y no habrá problemas….-pareció convencido de lo que decía.

-¿y tú nunca has tenido problemas?

-yo he tenido más de un problema, ¿qué te piensas que son estas marcas en mi piel?-señalo una especie de pintadas que tenia por todo el estomago, estaban incrustadas. Era como si le hubieran quemado duramente, sin embargo eran preciosas…

-¿te hicieron mucho daño?-pregunté preocupada

-tranquila angelito, ya me he acostumbrado…-me iba a coger de la barbilla para moverme un poco la cabeza, sin embargo se corrigió rápidamente.

-no me has contestado…-miró hacia abajo- ¿te hicieron daño?-pronuncie severamente

- piensa cuando a los animales los marcan a fuego, en ellos son simplemente unos segundos, sin embargo sigue siendo doloroso. Hacen lo mismo con nosotros, pero no son unos simples segundos, sino horas…-se quedo pensativo

-¿horas?, como… ¿Cómo aguantas que te hagan eso?, ¿Por qué no sigues las reglas y te ahorras todo ese sufrimiento?...-¿como Jaled podía soportar todo aquello?, simplemente era un crio… (comparado con los demonios superiores que tenían unos millones de años)

-Jazmín a veces las reglas de los superiores son estúpidas, prefiero pasar por el sufrimiento que hacer lo que no quiero

-Jaled pero…-sabía cómo se sentía pero…, eso era demasiado sufrimiento

-Sigamos a Diana, seguro que hoy también se mete en algún lio…-hizo un intento de sonrisa y agito sus alas lo más rápido que pudo para situarse al lado de nuestra humana.

Las clases de Diana pasaron bastante rápido, no suspendió ningún examen y no tuvo que ir al despacho del director (un record para ella). Lo que me preocupaba es que era viernes, y eso significaba que saldría de fiesta hasta altas horas de la noche…

Normalmente solía ganar yo en cuestiones que no fumara, bebiera…, pero Jaled solía tener más el control, le era más fácil…

Diana había quedado con sus amigos a las once y media en una discoteca llamada La Noche, era la misma discoteca de siempre…

Cuando llegue, Jaled ya estaba acechando….Estaba colocado en la barra… ligando con una diablesa, enseguida se dio cuenta de mi presencia, le dio un beso en los labios a su acompañante y en dos segundos estaba delante de mí.

-¿ya te has cansado de jugar?-pregunté indiferente.

-¿celosa angelito?-enseño sus colmillos a modo de superioridad….

-¿por?, ya te he visto con más de mil diablesas, esta solo era una mas….

-¿y no te gustaría ser una de mi lista?-miro hacia el lado

-¿perdón?, te conozco hace cien años y no me has interesado para nada, ¿crees que ahora va a ser distinto?-enarque una ceja, sin saber bien bien que había dicho.

-las cosas cambian, ¿porque no podrían hacerlo contigo?-decía mientras saludaba a los demonios que revoloteaban por la discoteca.

- ¿crees que algún día me podría enamorar de un demonio como tú?, ¿y más sabiendo que está prohibido?…-no sabía porque Jaled hacia esas preguntas y mas siendo un demonio tan listo…

-ya te recordare esta charla cuando nos estemos liando…-se rio descaradamente

-pero…como puedes ser tan estúpido!!-le grité. Sin embargo no me hizo caso, se giro y grito:

-¡Jacob, hermano!!-le dirigí una mirada asesina, luego mire al otro demonio que había llamado Jacob. ¿Jaled tenía un hermano?, en todos estos años nunca me lo había contado…

-¿qué haces aquí hermanito?-le sonrió Jacob mientras le abrazaba-¿no tendrías que estar “cuidando” a tu humana?

-jajaja, es justamente lo que estoy haciendo- su hermano me miro fijamente, note como sus ojos azules me interrogaban sin censura.

-¿Cómo te llamas ángel?-se coloco enseguida delante de mí- ¿cuál es el secreto de tu extraña belleza?

-¿Qué?, ¿se puede saber de que hablas?. Yo he nacido así, a no ser que cuando era pequeña me manipularan genéticamente…-intente parecer irónica

-no te burles de mi estúpido ángel, dime porque eres diferente a los demás.-estaba enfadado, lo decía seriamente.

-estúpido serás tú, ¡maldito demonio!!-se acerco a mí, me miro fijamente y me cogió fuertemente de el cuello, notaba como la respiración me fallaba…De pronto sentí que algo en el cuello me ardía fuertemente. Me provoco un dolor insoportable… no pude evitar chillar.

-¡suéltala Jacob!-grito Jaled mientras cogía a su hermano por los hombros empujándole ferozmente hacia un lado. No podía mantenerme en pie, las quemaduras del cuello aun me ardían. Mis piernas se debilitaron, provocando que me cayera sin remedio alguno.

-¿se puede saber porque proteges a este estúpido ángel?-le gritó Jacob volviendo a su posición inicial.-¿no me digas que te has enamorado?-esa vez sí que se molesto, demasiado para esa ridícula pregunta.

-¿Cómo preguntas eso?, ¿Cómo piensas eso siquiera?-le planto cara severamente

-no me puedes mentir Jaled, ¿Cómo puedes estar enamorado de este estúpido ángel?!!! –gritó duramente, todos los ángeles y demonios que habían en la discoteca se giraron. Pasado unos segundos volvieron a sus asuntos, no querían intervenir en problemas demoniacos.

-no estoy enamorado de ella, simplemente le he cogido un poco de aprecio…-bajo la voz. Hablaban como si yo no pudiera escucharles, como si no existiera….

-siempre has sido un idiota Jaled, el aprecio, el cariño, el afecto…todas esas cursiladas, es amor para nosotros. No podemos sentir lo que se llama amor, sin embargo si podemos sentir otras cosas….

-¡yo no siento nada por ella!, pero si no me crees será mejor que te vayas, que no vuelvas a hablarme…!!-nunca había visto a Jaled tan enfadado…,¿tanto le molestaría sentir algo por mí?....

-¡ja!, te piensas que es tan fácil ¿no?, eres mi hermanito…no te puedo dejar ir así por la vida-se burlaba de el- ahora me iré, pero tampoco creas que me voy a olvidar de ti, simplemente te tendré vigilado, no podrás dar un paso en el falso sin que yo esté allí….-en su rostro apareció una sonrisa malévola. Jaled no pudo protestar, Jacob había desapareció como si nada de eso hubiera pasado.

Mire a Jaled firmemente, el mantuvo la mirada unos segundos, después miro hacia otro lado avergonzado. Reacciono lentamente pero en unos minutos estaba a mi lado atendiéndome.

-¿cómo te encuentras?-su voz era aguda pero a la vez tierna, protectora…

-mejor, aun me arde un poco el cuello….-no se lo pensó dos veces, cogió un guante que había por ahí tirado y se lo puso. Luego suavemente paso su mano por mis quemaduras, notaba como poco a poco mis fuerzas se iban recuperando.